jueves, 20 de febrero de 2014

Entre todos podemos.


   La pobreza, es una de las grandes violaciones de los derechos de la infancia. 18.000 niños menores de cinco años mueren cada día por causas que se pueden evitar, como una neumonía, una diarrea o por malaria. Sin embargo, millones de personas y sobre todo niños, no pueden acceder a estos tratamientos médicos y a las ayudas sanitarias necesarias para poder combatir contra dichas enfermedades, ya que se encuentran bajo una inmoral situación de pobreza.
   
   La pobreza es la primera causa de desigualdad social y contra la que tenemos que luchar entre todos para poder acabar con ella, para conseguir una igualdad de derechos y un bienestar social. Sin la ayuda de todos, no es posible acabar con esto, por eso mismo tenemos que unirnos y luchar entre todos contra esta violación de los derechos de la infancia. Todos somos necesarios para cambiar la vida de estos niños, ya que son los más vulnerables y, en especial, los niños excluidos y marginados como son los niños con discapacidad, los niños indígenas y los niños de las minorías.
   
   Cada día hay más niños y niñas que tienen menos posibilidades de tener un futuro apropiado, ya que muchos de ellos pierden toda su infancia para convertirse en soldados a una edad cada vez más temprana. El reclutamiento de niños para la lucha armada es totalmente ilegal y supone una grave violación de los derechos de la infancia.
   
   Muchas veces me pregunto a mí misma; ¿Cómo es esto posible? ¿Cómo pueden permitir que sucedan estas cosas? Me parece increíble cómo en algunas sociedades, estén ocurriendo todas estas cosas y mucha gente se quede de brazos cruzados, sin hacer absolutamente nada. Pero no sólo en algunas sociedades, en España también está pasando esto, aunque no nos lo creamos pero sí, está sucediendo y aquí mismo, algo tan cercano a todos nosotros y aún así muchas personas siguen sin ser capaces de tomar conciencia por ello.
   
   El Comité de los Derechos del Niño es quien se encarga de tomar las medidas necesarias para proteger a los niños que presenten denuncias contra cualquier posible amenaza, solicitando al Estado que adopte medidas provisionales para proteger al niño o grupo de niños.

   El objetivo de UNICEF es que con estas ayudas puedan tener los niños mayores oportunidades para vivir una vida en mejores condiciones. Además, que tengan la oportunidad de poder acceder a una sanidad pública, estudiar, ser educados, aprender, ser protegidos, etc. Por último, pretenden acabar finalmente con la explotación y violencia infantil, y transformar la sociedad para dar una vida mejor.

¡NO A LA VIOLACIÓN DE LOS DERECHOS DE LA INFANCIA!



miércoles, 19 de febrero de 2014

¿Por qué esto?

   Hola a todos, me llamo Alicia, tengo 18 años y soy estudiante del primer año del Doble Grado en Trabajo Social y Educación Social en la Universidad Pablo de Olavide.  Una de las asignaturas de este segundo cuatrimestre es Tecnología de la Información y Comunicación en Educación Social (TIC) donde la profesora, nos ha planteado elaborar nuestro propio blog, en el cual iré comentando y reflexionando sobre temas relacionados con la Educación Social, y también pondré fotos, vídeos, argumentos y artículos relacionados con ello. 

   Desde pequeñita he querido trabajar con las personas porque es algo que siempre me ha gustado, el trato con ellas y todo lo relacionado con la educación. Por este motivo, pensé que la carrera de Psicología se acercaría lo máximo posible a lo que realmente quería. Sin embargo, cuando descubrí que existía este doble grado, que jamás había escuchado ni sabía nada de él, me informé y la verdad es que me gustó bastante la idea, ya que creo que me va a satisfacer plenamente.  Realmente, hago esto por devoción, por ayudar a los demás, a los más desfavorecidos y a todas aquellas personas que manifiesten algún tipo de problema, dependencia, discapacidad, etc.

   Hace unos 6 años, la Junta de Andalucía les cedió una de las casas de mi urbanización a niños procedentes de centros de acogida y de familias desestructuradas. Esto me ayudó bastante ya que me guió a realizar estas dos carreras, y además, tuve la posibilidad de conocerles. Me hice amiga de los seis niños de esta casa de acogida, incluso de sus educadores sociales y todo esto me ha hecho ver las cosas desde otro punto de vista.


   Por último, decir que gracias a Lorena, mi dulce prima de seis añitos que tiene Síndrome de Down, decidí finalmente hacer este doble grado puesto que es lo que realmente me gusta y con ello, espero poder cumplir todos mis objetivos.